En un viaje a Galicia, descubrimos un pequeño restaurante
escondido entre callejuelas del casco antiguo de Santiago de Compostela donde
nos ofrecieron unas tapitas de un guiso delicioso servido en pequeñas cazuelas
de barro. No conocemos la receta exacta pero tras algunos ensayos, os ofrecemos
nuestra versión muy parecida y que nos ha parecido deliciosa.
Esperamos que os guste y la disfrutéis tanto como nosotros.
Ingredientes (6 personas):
· 500 gr de ternera para marinar
· 1 puñado de garbanzos por persona
· 1 hueso de ternera
· 1 punta de jamón (hueso de jamón, pero que le quede algo de jamón :D)
· 1 sarta de chorizo
· 1 cebolla
· 2 patatas pequeñas
· 1 chorrito de vino blanco
· 1 chorrito de aceite de oliva
· Agua
· Harina
· Sal
Preparación:
La noche anterior, dejar los garbanzos en remojo.
Cortar en taquitos y enharinar levemente la ternera para sellarla y cortar el chorizo en rodajas similares en tamaño a la ternera. Picar la cebolla. Pelar las patatas, para cortarlas introducir el cuchillo y tirar del trozo para que se rompa, esto ayuda a que suelten el almidón.
Calentar un chorrito de aceite en una olla y dorar ligeramente la ternera y el chorizo.
Cuando esté, añadir la cebolla y continuar rehogando. Cuando la cebolla esté tierna, añadir un chorrito de vino blanco. Dejar que evapore el alcohol (5 minutos aproximadamente)
Cuando haya evaporado, añadir los garbanzos y cubrir con agua. Añadir también el hueso de jamón y de ternera, y por último, la sal.
Dejar cocer a fuego suave hasta que los garbanzos estén tiernos (aproximadamente 1 hora y media). Cuando empiece a hervir, espumar (retirar con una cuchara la espuma superficial que se forma)
Cuando lleve una hora cociendo, añadir las patatas troceadas.
Rectificar de sal (si es necesario), emplatar y listo.
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